Uruguay-Argentina: Divide y reinarás
El gobierno uruguayo autorizó a la empresa Finlandesa Botnia a producir pasta de celulosa, a partir del viernes 9 de noviembre, con lo cual se agrava definitivamente el conflicto que mantiene con el gobierno argentino y con los asambleístas de la ciudad entrerriana de Gualeguaychú quienes cortan el puente que une ambos países en forma casi cotidiana, desde hace varios meses.
El eje de la discusión es determinar si las pasteras contaminan el Rio Uruguay o no. Para los asambleístas no hay lugar a dudas: el proceso industrial de la fabricación de pasta de celulosa alterará las condiciones ambientales del rio y por consiguiente el microclima de la zona, con el consiguiente perjuicio tanto para la salud de los habitantes como para el turismo. El gobierno uruguayo y la empresa entienden que se van a tomar todos los recaudos para que ello no ocurra, y proponen una comisión mixta para auditar el impacto ambiental.
Si bien es cierto que Europa trata de enviar al Tercer Mundo las industrias más contaminantes, Argentina no se ha caracterizado por tener una política ambiental que haga hincapié en la ecología. Por el territorio de la provincia de Buenos Aires, no hay arroyo que se salve de la contaminación de las industrias químicas, metalúrgicas, curtiembres o papeleras, ante la nula determinación del gobierno central para poner fin a esta situación, con el consiguiente perjuicio para los habitantes de esas zonas.
¿A quien beneficia la virtual ruptura de relaciones entre Argentina y Uruguay? Sobre todo a quienes no quieren la integración del Mercosur, a quienes empujan a Uruguay a firmar un Tratado de Libre Comercio con Estados Unidos, a quienes de un lado y del otro del Rio Uruguay, sostienen que la hermandad entre los pueblos es una cuestión del pasado más que una categoría aplicable a la realidad actual.
Sería lamentable que el Imperio, que tuvo una derrota histórica en la Cumbre de Mar del Plata 2005 cuando quiso imponer el ALCA, haya encontrado una vez más un resquicio para dividir a nuestros pueblos y reinar.
1 comentario
Zenia -
Muy enjundioso tu anàlisis.